
El organismo recordó que desde 2002 las tasas de paro han bajado progresivamente en la gran mayoría de las áreas urbanas de los países de América Latina, aunque el desempleo sigue siendo elevado y hacia 2006 superaba en 2,4 puntos porcentuales el nivel de 1990.
La CEPAL pronosticó que "como consecuencia de la crisis internacional, el empleo se estanque durante 2009 y que las remuneraciones reales se mantengan sin variaciones, o disminuyan levemente. El desempleo podría aumentar, lo que afectaría especialmente a los sectores más pobres de la población. La tendencia prevaleciente ya muestra mayor concentración del desempleo en los trabajadores de menores ingresos".
El centro de análisis difundió su informe 'Panorama social de América Latina 2008', en el que advierte que "las previsiones indican un deterioro del ingreso de los hogares que se concentraría en los trabajadores por cuenta propia y los asalariados informales, cuyos empleos son más sensibles al ciclo económico".
La CEPAL recomendó "reforzar la asistencia social a grupos vulnerables a la crisis, a través de canastas alimentarias, pensiones de emergencia, programas de empleo y otras iniciativas similares" y para hacer frente a los problemas de desempleo dijo que es necesario que se pongan en marcha "programas especiales de inversión pública en infraestructura y ampliar los seguros de desempleo".