El PP valenciano parece no estar preparado para anuncios positivos por parte del gobierno de España. Su estrategia de enfrentamiento con este gobierno desde 2004, utilizando un victimismo, recurrente y desmoralizante para nuestra autoestima, le ha permitido desviar las responsabilidades y forjar una supuesta defensa de los intereses valencianos, a base de quejíos, que le ha proporcionado unos estimables réditos electorales.La decisión del gobierno de España de destinar 8.000 millones a los municipios para obras de inversión con el propósito de que éstos se conviertan en actores generadores de empleo ha pillado al PP con el paso cambiado. Muestra de ello fueron las declaraciones de Rita Barberá al presentar sus presupuestos para 2009 reclamando al gobierno mayores recursos.”Los presupuestos del Estado reducen de manera drástica la aportación a los ayuntamientos y el gobierno reduce así los servicios que prestamos a los vecinos y en concreto a los más necesitados”, dijo entre otras cosas todas ellas merecedoras de invocación por desatinadas. Es evidente que Barberá desconocía la decisión que el gobierno tomaría solo cinco días más tarde. Cuando nuestra alcaldesa supo que le llegaban 141 millones de euros del gobierno para inversión, más del doble de lo contemplado en sus propios presupuestos, lejos de alegrarse lo comparó con el suministro de una aspirina, sin caer en la cuenta de que en este terreno eufemístico su presupuesto de inversión quedaba al nivel del esparadrapo.
A los socialistas se nos ha imputado como error la estrategia del “No”. ¿Acaso, no viene deslizándose de modo exagerado el PP en esa cuestionada estrategia negativa?.
A los socialistas se nos ha imputado como error la estrategia del “No”. ¿Acaso, no viene deslizándose de modo exagerado el PP en esa cuestionada estrategia negativa?.
Publicado en el Diario ABC el 8 de Diciembre de 2008
