lunes, 3 de noviembre de 2008

NUESTRAS VIDAS SON LOS RIOS

Aunque el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha dicho que “en España vende lo que rompe, cuando alguien se sale del sentido común y se atrinchera”, lo cierto es que somos muchos los que apreciamos, cada vez más, el sentido común, y despreciamos el ansia por el escándalo, la alarma y las posiciones enrocadas. Sin duda, las palabras del extremeño entrañan un gran sentido común, el suficiente quizás para que no pueda captarlo el portavoz de Medio Ambiente del grupo popular en las Cortes valencianas, José Císcar, el cual ha querido entender que las mismas constituían un refrendo a la política hídrica de nuestro presidente, Francisco Camps.

Si uno ha querido tener la oportunidad de atender las declaraciones del presidente extremeño habrá entendido que la crítica que hace a los “presidentes (autonómicos) que se han hecho hombrecitos al hacer política localista con el agua” alcanza con plenitud a nuestro presidente, o ¿acaso no ha sido éste su banderín de guerra? Más aún, el extremeño critica que el recurso al agua continua con el de la financiación, ¿les suena? Pues eso, verde y con asas. Fernández Vara critica esta actitud propia de los nacionalistas y no de quienes consideran que España es algo más que la suma de diecisiete partes.
El PP local, que tenía varias opciones para reaccionar ante estas declaraciones, ha optado por la que mejor conocen, la manipulación. Pero yo quiero quedarme con el principal argumento de G.F.V. “si defendemos que no cotizan los territorios sino las personas, luego no se puede decir que el agua sí es de los territorios”.
Publicado en el Diario ABC el 3 de Noviembre de 2008