El fallecimiento del escritor comprometido con la realidad y las emociones nos han dejado y con su marcha añoramos buena parte de nuestro recorrido vital iluminado por sueños contagiados por personas que como él nos hizo vibrar, sentir, pensar, amar e intentar ser mejores personas. Benedetti era una referencia en nuestras vidas. En el recuerdo, su imagen tranquila, tierna pero firme y rebelde. Como sobre él se escribirá mucho y bien estos días, solo quiero transcribir aquí el correo que me envía Juan Guillermo Vallejo desde Colombia: “Hoy falleció Mario Benedetti a los 88 años de edad. La verdad, siempre creí que Benedetti era inmortal. En mis años de adolescencia y juventud fue una suerte de guía, piloto y maestro que me inició en una literatura llena de sensibilidad y compromiso con nuestra realidad latinoamericana. Siempre he pensado que Benedetti es ese hombre maravilloso que supo nombrar cada sensación y cada sentimiento como yo hubiera querido hacerlo. Hoy quiero honrar su memoria y evocar esas dulces sensaciones que me provocaron sus relatos y poemas, tan bellamente cantados por tantos músicos del mundo. Los invito a que vibremos con su obra y cantemos sus bellos poemas.”